Según ha informado el Concello de Santiago, se destinarán más de 3,6 millones de euros para promover la creación de áreas verdes y conexiones ambientales en la ciudad. También se llevarán a cabo mejoras en la laguna del Auditorio, en Pontepedriña y en el Jardín Botánico. El proyecto Entre Sar y Sarela, que ya había sido anunciado por la administración local anterior, recibirá una ayuda de 3.613.586,17 euros a través de la convocatoria de la Fundación Biodiversidad. Esta convocatoria tiene como objetivo fomentar acciones de renaturalización y resiliencia en ciudades españolas, en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia y financiado por los fondos europeos NextGenerationEU.

El proyecto, presentado conjuntamente por el Ayuntamiento de Santiago y la Universidad de Santiago de Compostela, contempla diversas actuaciones en diferentes zonas de la ciudad, como el barrio de Pontepedriña, el Jardín Botánico y la laguna del Auditorio de Galicia. El propósito principal es completar la red de senderos y fortalecer el anillo verde alrededor de la ciudad.

El objetivo de Entre Sar e Sarela es desarrollar un modelo urbano sostenible, aumentando la infraestructura verde y mejorando la conectividad ambiental en la ciudad. Además, se busca regenerar áreas degradadas ambientalmente para crear nuevos ecosistemas y aumentar la biodiversidad. Para lograrlo, se basará en la Estrategia de Infraestructura Verde y Adaptación al Cambio Climático de Santiago, que se elaborará como parte del proyecto.

Esta iniciativa está alineada con la Propuesta Estratégica Plurianual del Consorcio para el período 2021-2027-2032 y la Agenda Urbana 2030 aprobada por el Ayuntamiento. Su objetivo es mejorar la habitabilidad en el espacio urbano y aumentar la resiliencia de la ciudad frente a los efectos del cambio climático.

En última instancia, se busca lograr un entorno urbano resiliente, promoviendo la renaturalización de áreas urbanas y fluviales en la ciudad. Para ello, se buscará liberar espacios públicos y transformar áreas destinadas al tráfico rodado mediante soluciones basadas en la naturaleza, como la creación de Zonas de Bajas Emisiones. También se fomentará la recuperación del ciclo natural del agua y las corrientes naturales del territorio.

Además, se fortalecerá la infraestructura verde en el entorno urbano mediante la restauración de ecosistemas naturales y la conectividad de espacios naturales, creando una red interconectada de corredores naturales como un cinturón verde. Esto aumentará las áreas de recreación y potenciará la biodiversidad en la zona.

Para implementar estas acciones, se buscará la participación activa de los ciudadanos y otros actores locales, como el Consorcio, colectivos, entidades, asociaciones y organizaciones. También se llevarán a cabo acciones de sensibilización sobre la importancia de la relación entre la naturaleza, la biodiversidad y la ciudad, y su impacto en la salud, el bienestar colectivo y la habitabilidad del espacio urbano.

En resumen, el proyecto contempla cinco actuaciones integradas: el Barrio Verde de Pontepedriña, que implica la renaturalización de la zona y la creación de un corredor ecológico urbano; la naturalización de la laguna del Auditorio de Galicia, la restauración fluvial del Río Corgo y la mejora ecológica; la consolidación del Anillo Verde exterior y la restauración ambiental, junto con la creación de un laboratorio vivo-urbano agroecológico en el Jardín Botánico; la recalificación y recuperación ambiental del área verde del barrio de Cornes; y, por último, la restauración ecológica y el fomento de la biodiversidad en el monte periurbano del Viso. Cada una de estas actuaciones recibirá una inversión estimada para su implementación.